Casi todos tenemos un disco favorito, bueno, yo les contaré sobre el mío, o más bien sobre el que fue el mío.
Hace más o menos un año, que lo escuchaba. Antes de tenerlo, no me llamaba mucho la atención, quizás fue el prejuicio y las críticas que había escuchado. Pero un día tuve la suerte de poder escucharlo. No son de esos discos que a la primera enganchas y te gustan todas las canciones, sino que de esos que de a poquito vas descubriendo cosas nuevas y te enamoras de ellas. A mí me pasó eso con este disco, al principio como que no lo quería escuchar, pero después dejé de resistirme y caí bajo sus encantos. Entonces comencé con un pedacito de alguna canción cada día, luego ya eran canciones completas y al fin escuchaba varias veces el disco en el día. Y lo mejor de todo es que nunca me cansaba ni terminaba de descubrir cosas nuevas en el. cada acorde me recordaba a otras canciones, era el disco matriz, de donde salen todos los otros. Tenía mis canciones favoritas, las más suaves creo, pero también me gustaban las otras, sólo que no en la misma intensidad. Además se había convertido en mi banda sonora, porque me acompañaba a todas las cosas fueran importantes o no. Ahí estaba cuando necesitaba musicalizar algo. Ustedes comprenderán que después de escuchar un año un disco, todos los días, y por varias veces, se comienza a rallar, algunas pistas se saltan y ya no es lo mismo, de hecho te da pena seguir escuchando porque le tienes tanto cariño que no quieres que se siga estropeando. A parte que son tus canciones favoritas las que se rallan, ni modo si son las que más uno ha escuchado y las que te gustan en menor intensidad no es lo mismo si no están las otras. Así que mejor dejar de escucharlo por un tiempo. porque uno no puede decir que nunca más lo escuchará, eso sería demasiado radical, especialmente si viene de mi. escucharé mi disco favorito en todas las otras canciones, de hecho todas las canciones me recuerdan a este disco. espero que luego que pase un tiempo lo pueda volver a escuchar y sea como antes, que me acompañaba en cada instante de mi día.
Hace más o menos un año, que lo escuchaba. Antes de tenerlo, no me llamaba mucho la atención, quizás fue el prejuicio y las críticas que había escuchado. Pero un día tuve la suerte de poder escucharlo. No son de esos discos que a la primera enganchas y te gustan todas las canciones, sino que de esos que de a poquito vas descubriendo cosas nuevas y te enamoras de ellas. A mí me pasó eso con este disco, al principio como que no lo quería escuchar, pero después dejé de resistirme y caí bajo sus encantos. Entonces comencé con un pedacito de alguna canción cada día, luego ya eran canciones completas y al fin escuchaba varias veces el disco en el día. Y lo mejor de todo es que nunca me cansaba ni terminaba de descubrir cosas nuevas en el. cada acorde me recordaba a otras canciones, era el disco matriz, de donde salen todos los otros. Tenía mis canciones favoritas, las más suaves creo, pero también me gustaban las otras, sólo que no en la misma intensidad. Además se había convertido en mi banda sonora, porque me acompañaba a todas las cosas fueran importantes o no. Ahí estaba cuando necesitaba musicalizar algo. Ustedes comprenderán que después de escuchar un año un disco, todos los días, y por varias veces, se comienza a rallar, algunas pistas se saltan y ya no es lo mismo, de hecho te da pena seguir escuchando porque le tienes tanto cariño que no quieres que se siga estropeando. A parte que son tus canciones favoritas las que se rallan, ni modo si son las que más uno ha escuchado y las que te gustan en menor intensidad no es lo mismo si no están las otras. Así que mejor dejar de escucharlo por un tiempo. porque uno no puede decir que nunca más lo escuchará, eso sería demasiado radical, especialmente si viene de mi. escucharé mi disco favorito en todas las otras canciones, de hecho todas las canciones me recuerdan a este disco. espero que luego que pase un tiempo lo pueda volver a escuchar y sea como antes, que me acompañaba en cada instante de mi día.
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